La manera de mantener más ignorante a la raza

O lo que es lo mismo, hacen como que hacen pero seguimos siendo los esclavos del siglo XXI.

En reciente estudio publicado en octubre de este año, la Fundación para el Desarrollo Infantil (FCD por sus siglas en inglés), organismo gringo, reveló que tan sólo el 15% (sí, el quince por ciento), de los jóvenes latinos que están en el cuarto grado de primaria, más o menos de nueve años de edad, son capaces de leer a su nivel.
De acuerdo al mismo estudio, menos de una tercera parte de los niños de ese grado son capaces de ¡leer adecuadamente! ¿Para dar miedo? ¿Para preocupar? ¿Las dos? Sí, las dos.
Según esto, los mejores lectores, el 40% son los llamados asiáticos (orientales sería mejor, ya que para el gringo, el asiático es el de ojos rasgados, olímpicamente o de un plumazo borraron a los demás países de ese continente). Les siguen los de “raza blanca” es el 39%. De los amerindios el 19% y los morenos apenas el 12%.
De acuerdo al director de la Fundación Rubi Takanishi (oriental él) en un despliegue de racismo, (desde la perspectiva de su “seguro servilleta”) “es una tragedia para Estados Unidos que más de la mitad de niños blancos y los asiáticos de cuarto grado no sepan leer a su nivel”. ¿Qué tal el comentario? Claro, que luego manifestó, para “taparle el ojo al macho” o “el sol (del naciente tenía que ser) con un dedo”, expresó que para los latinos, amerindios y morenos, es peor ya que más del 80% de ellos no son capaces de leer en ese nivel de cuatro grado”.
Así, la verdad no duele e incomoda, al afirmar que los niños norteamericanos no están preparados para aprender y para colmo las escuelas públicas no tienen idea de qué hacer para mejorar las cosas.
Para muestra un botón. Al menos en California, si un niño no sabe leer o escribir o la bases de matemáticas, tal vez, un tal vez muy remoto, lo hagan repetir el año y eso depende de la edad, que si está en cuarto de primaria o más arriba, es casi imposible que esto suceda, y lo “promueven socialmente”, esto es aprueba el año “para que el niño no sufra traumas, por estar en un salón de clase con niños menores que él o ella”. Hágame el “refavorcabor”.
Así que ese niño, o niña, avanza de grados escolares, pero cada año está más atrasado ya que al no saber leer, pues no podrá aprender el idioma, hacer matemáticas o ciencias y por supuesto, es más seguro que no termine la preparatoria, bachillerato o “high school” como le llaman allá.
A esa niña o niño, sobre todo, latino, moreno y amerindio, entonces no le queda más que aumentar las filas de trabajadores explotados, sin posibilidades de ascender en la escala no digamos social, pero además económica y lo peor del caso, es que la ignorancia predominará haciéndoles más fáciles de gobernar y de que compren todo aquello que el gobierno, a través de la televisión, radio, cine, y tabloides les quiera vender o lo que podemos llamar, “la política del W.” que así logró la reelección y hundió la país, y de paso al planeta en general, en una depresión económica que a ver cuándo tocamos fondo.
Y los “neocientíficos” mexicanos necios en copiar lo malo del gringo, presentándolo como grandes avances en la educación… coño, si ya de por sí con el sistema del PRI nos tenían jodidos, ahora copiando el sistema gringo, nuestras nuevas generaciones van a estar, requetejodidas.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645)
Escritor español"