viernes, 24 de octubre de 2008

Como confiar en quién se hecha pa’ tras

(y pa’ tras ni pa’ tomar impulso dice el caribeño)
Esto de las elecciones en Estados Unidos de Norteamérica, es tela de donde cortar. Sobre todo cuando la posición del candidato republicano John McCain, muy similar a la del boxeador méxico-americano apodado “Golden Boy” Óscar de la Hoya, es que ya no sabe para dónde hacerse, arrimarse o en que esquina resguardarse.
El tema ahora es el que ha faltado en el debate. La inmigración.
Hace algún tiempo, el suspirante junto al último icono de la familia Kennedy, por supuesto demócrata, presentaron un proyecto de ley bipartidista para darle una solución al problema de la inmigración en EE.UU. Por supuesto, no era la única propuesta, pero las otras eran de tan malas que ni acordarse de ellas, y la de McCain-Kennedy, de los males el menos era el decir de la gente.
Ahora, todo un suspirante a seguir los errores de su partido y del nefasto W. Bush, ha decidido meter reversa en la reforma migratoria, y como el ridículo PRI mexicano, (porque ¿cómo se puede ser revolucionario e institucional?), hacerse institucional y manifestar que va a aplicar la ley que ya está y listo.
¿Resultado? Pues que a los que están radicando en el gringo sin los papeles burocráticos que ellos entregan, los van a regresar a su país, deportar pues.
¡Ah!, pero esperen. No a todos. A los que van a regresar es a los que no tengan el mismo color de piel que el McCain o la Palin (la Pálida de ahora en adelante) esto es, a los que carecen de color (por aquello de que el blanco es la ausencia del ídem), que a todos los demás, van pa’ tras.
Así las cosas, en caso de que los republicanos ganen de nuevo (Dios, Alá, Buda, Quetzalcóatl, Odín, Zeus y demás dioses modernos y antiguos, libren al planeta de semejante barbaridad), la intolerancia y desgracia de los no documentados, en especial los latinoamericanos, será tan drástica como lo fue en los años 30 y 40 del siglo pasado, que aunado a la guerra inútil en Irak, la crisis económica está apretando a los güeritos más de lo que quieren reconocer y no son capaces de culpar al tal W. Bush de los errores criminales que ha cometido (la verdad, en mi lista de terroristas más temidos, es el que la encabeza) y comenzarán, o por mejor decir continuarán, una caza de brujas peor de la que hicieron en el siglo XVIII allá en Salem, Massachussets, y el pato lo pagarán doble, ya que el gobierno tendrá que mantener a los hijos de esos sin documentos que ya han nacido aquí, a menos de que los republicanos logren la mayoría en el ambas cámaras y entonces logren su sueño de quitarle la ciudadanía por nacimiento a los hijos de los que no tienen documentos legales.
Por el bien de la humanidad, esperemos que gane el moreno o las cosas se pondrán color de hormiga.


"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645)
Escritor español"

1 comentario:

CHELAMONSTER dijo...

A como van las cosas más bien los gringos van a terminar regresando a las labores reservadas a los jodidos migrantes, como la pizca y otras que su anglosajoncito cuerpo llevaba muchas generaciones sin hacer.
Y ese si va a ser un pex!
Que gane el moreno!