viernes, 14 de octubre de 2011

¿Un multimillonario con corazón?

O lo que es lo mismo, ¿tenemos esperanza de que los ricos conozcan lo que es tener sentimientos por los pobres?

En efecto. La riqueza o la extrema riqueza, tiende a separar las fibras sentimentales por los pobres muy pronto, incluidos los nuevos ricos en el proceso.

Hoy, el mundo está tratando de que los más ricos paguen más impuestos para así aligerar la carga tributaria de las masas, de la que formamos parte todos.

A continuación, la nota de AFP con fecha de ayer y que me encontré hoy y que comparto con ustedes y en cierta forma, le devuelve a mi esperanza por la humanidad un pequeño soplo.

Warren Buffett publica sus ingresos e impuestos para demostrar que paga poco


El multimillonario Warren Buffett, quien inspiró las recientes propuestas del presidente Barack Obama para aumentar la tributación de los estadounidenses más ricos, reveló el detalle de sus ingresos e impuestos para probar que paga menos que el contribuyente medio.


En una carta dirigida el miércoles a un congresista, el tercer hombre más rico del mundo afirma haber ganado 62,8 millones de dólares el año pasado, convertidos en un total imponible de 39,8 millones.


Buffett admite haber pagado 6,9 millones de dólares en impuestos, una tasa del 17,3%, netamente menos, según él, que el porcentaje que tributan muchos estadounidenses, incluida su propia secretaria.


En su misiva al representante Tim Huelskamp, quien criticó su posición sobre los impuestos, señala que la mayoría de los senadores y representantes paga más del 30% de sus ingresos en impuestos. "Como lo hacen todos los empleados de mi oficina, salvo yo", añadió Buffet.


Buffett, quien ha acumulado una fortuna que supera los 50.000 millones de dólares gracias a inversiones de su fondo Berkshire Hathaway, respondía a una exhortación de Huelskamp a probar la veracidad de sus afirmaciones sobre la tributación porcentualmente menor que pagan los ricos, haciendo pública su hoja de impuestos.


"Lo que podría ser útil sería que un gran número de los 'ultra-ricos' hicieran públicos sus impuestos", escribe Buffett, citando entre otros a Rupert Murdoch, propietario de The Wall Street Journal, quien la semana pasada criticó sus llamamientos a una mayor imposición a los ricos. "Numerosos 'ultra-ricos' tienen tasas (impositivas) todavía más bajas que yo con el Gobierno federal", afirma Buffett.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
 Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

jueves, 13 de octubre de 2011

Y así quién no quiere ser mariscal de campo del fútbol americano

O lo que es lo mismo, yo me apunto.
Estas son algunas de las jugadoras de la Lingerie Football League en los Estados Unidos.
Creo que el dirigente de  la FIFA pretende hacer lo mismo con el Mundial Femenil.

Ahí les dejo eso y sus mercedes me dicen qué piensan.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
 Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

Lo Cortés no nos quita los Cuauhtémoc, o lo Atahualpa ni lo Jerónimo

O lo que es lo mismo, a pesar de todo y 519 años de historia, hoy por hoy, los verdaderos americanos hemos tratado de encontrar puentes con los hispanos.

“Es aspiración fomentada por la Unión Ibero-Americana, y para cuya realización se propone efectuar activa propaganda en 1913, la de que se conmemore la fecha del descubrimiento de América, en forma que a la vez de homenaje a la memoria del inmortal Cristóbal Colón, sirva para exteriorizar la intimidad espiritual existente entre la Nación descubridora y civilizadora y las formadas en el suelo americano, hoy prósperos Estados.”
Faustino Rodríguez –San Pedro, ministro español. 1913

Qué tal el ministro. Si hubiese dicho eso ayer, hubiera resucitado viejos odios entre los americanos (no los gringos que se robaron todo un patronímico continental) y los otrora gachupines (que en 1810, según dicen Hidalgo pidió a la gente del pueblo salir a matar en el inicio de la lucha de independencia de España en México).

Encuentro de dos culturas se queda corto ya que los españoles traían a cuestas 800 años de dominio musulmán y judío (visto en el conocimiento de la medicina y por supuesto el billete, parné, lana, marmaja, duros, pesetas, pesos pues) y la riqueza cultural de los pueblo precolombinos en todo el continente americano.

En fin, bien podríamos iniciar aquí una larga y sinuosa discusión si los españoles trajeron o no algo de civilización a esta parte del planeta… baste por hoy, enviar un abrazo fraternal y tratar de resanar las divergencias y odios entre los países hermanos de habla castellana… en la espera de que algún día, el sueño bolivariano sea una realidad y América sea para los americanos, pero no para los gringos.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
 Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

Ahora resulta que los iraníes no pueden solos

O lo que es lo mismo, deben de contratar a Z para que les haga el trabajo sucio.


En efecto. Estos días, la prensa gringa se ha llenado de páginas sobre el presunto ataque orquestado por los iraníes para darle “su chicharrón” al embajador de Arabia Saudita en la ONU. Entre las curiosidades del caso, está que todo se estaba planeando en… sí, adivinó usted, ¡Tejas!

Según esto, el iraní norteamericano Manssor Arbabsiar, de 56 años era el “cerebro” del complot y estaba dispuesto a contratar a un sicario de los Zs para ajusticiar al embajador saudí árabe y mientras eso ocurría, detonar algunas bombas (y no precisamente yucatecas) en la embajada de Israel y la de Arabia Saudita.

Por supuesto las reacciones no se han hecho esperar y las sanciones económicas a Irán van que vuelan empezando por vaya la sutileza de la paradoja con la línea aérea que según las fuerzas de “inteligencia” gringas, que ya nos han demostrado su capacidad al no encontrar una sola arma de esas que llaman de destrucción mundial en suelo iraquí.

Y la cosa no para ahí. Resulta que Arbabsiar estaba casado con una latina, quien asegura que a pesar de estar separados desde hace tiempo, Arbabsiar no sería capaz de algo así… no sé si se refiere a que no tenga la imaginación para hacerlo o simplemente la capacidad de realizarlo.

Por supuesto, Irán ha condenado la acusación gringa con toda la fuerza que se les permite en el juguetito gringo conocido como Naciones Unidas, que de unidas no tienen nada más si no es en beneficio de país anfitrión.

No es que los persas, como se les conocía hasta hace varios años, sean o hayan sido unas blancas palomitas a lo largo de sus historia, y que su actual presidente Mahmoud Ahmadinejad sea un “lindo gatito” con todas esas teorías de conspiración que maneja muy bien (la más reciente, en la ONU, es que el ataque de septiembre 11 del 2001 fue orquestado por el gobierno norteamericano par poder ocupar por la fuerza varios territorios del oriente medio), además de no reconocer a Israel como país y apoyar la creación del estado Palestino.

Como están las cosas, entre estos dimes y diretes el otrora premio Nobel de la Paz Barak Obama, sí el presidente gringo, ha manifestado que “Irán pagará un precio por la conspiración”…

La pregunta es ¿y cuándo los gringos han pagado cualquier precio por sus conspiraciones en todo el planeta?

Aquí aquello de que con la vara que midas serás medido no encaja.

Lo que encaja es que para “taparle el ojo al macho” la atención del público norteamericano está siendo desviada hacia dos de sus favoritos grupos de chivos expiatorios, los árabes que no juegan con ellos y los mexicanos a los que acusan de llenarles sus pueblos de drogas, cuando ellos mismos son los que la demandan y sobre todo y lo más triste, que son ellos, la CIA, el FBI, la DEA y demás, los que nutren de armas a los carteles de la droga mexicano y del resto del mundo para mantener el principio maquiavélico por excelencia “divide y vencerás”.

La cosa es que casi siempre, les compramos el producto sin importar lo malo que este sea.

Si los persas son culpables, que se castigue a los responsables, pero no a todo un pueblo, porque al castigar a todo un pueblo, lo único que se logra es que ese pueblo se una en causa común contra enemigo común… sino, al tiempo como diría un ilustre periodista tabasqueño.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
 Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

viernes, 7 de octubre de 2011

"Mi vida ha sido capricho, impulso, pasión, anhelo de la soledad, mofa de las cosas de este mundo; un honesto deseo de futuro."

O lo que es lo mismo, el sufrimiento, también genera grandes obras.

En efecto. Un día como hoy pero de 1849 fallecería uno de los autores literarios más grandes del planeta, Edgar Allan Poe, y que tendría gran influencia en la literatura mundial. Las palabras que abren esta ventana, pertenecen a una carta dirigida por Poe a un su amigo, James Lowell, enviada en 1844.

Uno de sus más fervientes admiradores escribió:
“¡Lamentable tragedia la de la vida de Edgar Poe! Su muerte, ¡desenlace terrible cuyo horror incrementa la trivialidad! Todos los documentos leídos me han llevado al conocimiento de que los Estados Unidos no fueron para Poe sino una vasta prisión que recorría con la agitación febril de un ser creado para respirar en un mundo más aromático —que el de una gran barbarie iluminada con gas—, y que su vida interior, espiritual, de poeta o incluso de borracho, no era sino un esfuerzo perpetuo por escapar a la influencia de esta antipática atmósfera. Despiadada dictadura la de la opinión en las sociedades democráticas; no imploréis de ella ni caridad, ni indulgencia”
Charles Baudelaire, en su obra de 1856 “Edgar Allan Poe, su vida y sus obras.”


¡Ah! Y cuanta verdad expresa el francés al afirmar que de las sociedades democráticas no se puede implorar ni caridad ni indulgencia.

Eso, hoy por hoy, sigue siendo la aterradora realidad del planeta... una realidad que ni el mismo Poe, ni sus seguidores han podido predecir y que sin embargo, es el despertar de cada día de millones (tal vez sería mejor decir billones) de seres humanos.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

Reglas básicas de convivencia.

O lo que es lo mismo, un poco de civismo no duele.


En efecto. Según uno de esos filósofos de la antigüedad, el hombre es un animal social…

después nos volvimos políticos y ahí es dónde la tunca torció el rabo, pero eso es harina de otro costal.


Por ahora, les dejo estas reglitas básicas de convivencia que alguien tuvo a bien compartir con su seguro servilleta.

1. ¿Llegó? Salude.

2. ¿Se va? Despídase

3. ¿Encendió? Apague

4. ¿Abrió? Cierre

5. ¿Desarmó? Arme

6. ¿Rompió? Arregle

7. ¿Ensució? Limpie

8. ¿Mojó? Seque

9. ¿No sabe cómo funciona? No toque

10. ¿No sabe cómo hacerlo mejor? No critique

11. ¿No vino a ayudar? No moleste

12. ¿Pidió prestado? Devuelva

13. ¿No le pertenece? Pida permiso

14. ¿Habló? Hágase cargo

15. ¿Prometió? Cumpla

16. ¿Compró? Pague

17. ¿Ama? Dígalo

18. ¿Le gustó? Compártalo.


Son diez y ocho reglitas simples... tal vez así, hagamos del hogar, la escuela, el trabajo, el barrio, la ciudad, el estado, el país, el mundo un lugar más adecuado para vivir hoy y para las futuras generaciones.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
 Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

jueves, 6 de octubre de 2011

Y pese a todo, lo logró

O lo que es lo mismo, una vez más el ingenio y la perseverancia logran llevar a un ilustre desconocido a la cumbre de los logros... aunque la muerte se lo haya llevado de forma temprana.

A continuación, el discruso de Steve Jobs (24 feb 1955-5 oct 2011) dirigiera a los egresdos de la Universidad de Stanford (Palo Alto, California, 2005) y que bien podría ser su legado más importante a la humanidad.

Yo nunca me gradué de una universidad. La verdad sea dicha, esto es lo más cerca que he estado de una graduación.

Hoy deseo contarles tres historias de mi vida. Eso es. No es gran cosa. Sólo tres historias.

La primera historia se trata de conectar los puntos

Me retiré del Reed College después de los primeros 6 meses y seguí yendo de modo intermitente otros 18 meses o más antes de renunciar de verdad.
Entonces ¿por qué me retiré? Comenzó antes de que yo naciera. Mi madre biológica era joven, estudiante de universidad graduada, soltera, y decidió darme en adopción. Ella creía firmemente que debía ser adoptado por estudiantes graduados. Por lo tanto, todo estaba arreglado para que apenas naciera fuera adoptado por un abogado y su esposa; salvo que cuando nací, decidieron en el último minuto que en realidad deseaban una niña. De ese modo, mis padres que estaban en lista de espera, recibieron una llamada en medio de la noche preguntándoles: "Tenemos un niño no deseado; ¿lo quieren?". Ellos dijeron "Por supuesto". Posteriormente, mi madre biológica se enteró que mi madre nunca se había graduado de una universidad y que mi padre nunca se había graduado de la enseñanza media. Se negó a firmar los papeles de adopción definitivos. Sólo cambió de parecer unos meses más tarde cuando mis padres prometieron que algún día yo iría a la universidad.
 Luego a los 17 años fui a la universidad. Sin embargo, ingenuamente elegí una universidad casi tan cara como Stanford y todos los ahorros de mis padres de clase obrera fueron gastados en mí matrícula. Después de 6 meses yo no era capaz de apreciar el valor de lo anterior. No tenía idea de lo que quería hacer con mi vida y no tenía idea de la manera en que la universidad me iba a ayudar a deducirlo. Y aquí estaba yo, gastando todo el dinero que mis padres habían ahorrado durante toda su vida. Así que decidí retirarme y confiar en que todo iba a resultar bien. Fue bastante aterrador en ese momento, pero mirando hacia atrás fue una de las mejores decisiones que tomé. Apenas me retiré, pude dejar de asistir a las clases obligatorias que no me interesaban y comencé a asistir irregularmente a las que se veían interesantes.
 No todo fue romántico. No tenía dormitorio, dormía en el piso de los dormitorios de amigos, llevaba botellas de Coca Cola a los depósitos de 5 centavos para comprar comida y caminaba 11 kilómetros, cruzaba la ciudad todos los domingos en la noche para conseguir una buena comida a la semana en el templo Hare Krishna. Me encantaba. La mayor parte de las cosas con que tropecé siguiendo mi curiosidad e intuición resultaron ser inestimables posteriormente.
Les doy un ejemplo: en ese tiempo Reed College ofrecía quizás la mejor instrucción en caligrafía del país. Todos los afiches, todas las etiquetas de todos los cajones
estaban bellamente escritos en caligrafía a mano en todo el campus. Debido a que me había retirado y no tenía que asistir a las clases normales, decidí tomar una clase de caligrafía para aprender. Aprendí de los tipos serif y san serif, de la variación de la cantidad de espacio entre las distintas combinaciones de letras, de lo que hace que la gran tipografía sea lo que es. Fue hermoso, histórico, artísticamente sutil de una manera en que la ciencia no logra capturar, y lo encontré fascinante. Nada de esto tenía incluso una esperanza de aplicación práctica en mi vida. No obstante, diez años después, cuando estaba diseñando la primera computadora Macintosh, todo tuvo sentido para mí. Y todo lo diseñamos en la Mac. Fue la primera computadora con una bella tipografía. Si nunca hubiera asistido a ese único curso en la universidad, la Mac nunca habría tenido tipos múltiples o fuentes proporcionalmente espaciadas. Además, puesto que Windows sólo copió la Mac,es probable que ninguna computadora personal la tendría. Si nunca me hubiera retirado, nunca habría asistido a esa clase de caligrafía, las computadoras personales no tendrían la maravillosa tipografía que tienen.
Por supuesto era imposible conectar los puntos mirando hacia el futuro cuando estaba en la universidad.
Sin embargo, fue muy, muy claro mirando hacia el pasado diez años después.
Reitero, no pueden conectar los puntos mirando hacia el futuro; solamente pueden conectarlos mirando hacia el pasado.
Por lo tanto, tienen que confiar en que los puntos de alguna manera se conectarán en su futuro. Tienen que confiar en algo - su instinto, su destino, su vida, su karma, lo que sea. Esta perspectiva nunca me ha decepcionado, y ha hecho la diferencia en mi vida.


La segunda historia es sobre amor y pérdida


Yo fui afortunado, descubrí lo que amaba hacer temprano en la vida. Woz y yo comenzamos Apple en el garage de mis padres cuando tenía 20 años. Trabajamos duro y en 10 años Apple había crecido a partir de nosotros dos en un garage, transformándose en una compañía de US$2 mil millones con más de 4.000 empleados. Recién habíamos presentado nuestra más grandiosa creación - la Macintosh - un año antes y yo recién había cumplido los 30. Y luego me despidieron. ¿Cómo te pueden despedir de una compañía que comenzaste? Bien, debido al crecimiento de Apple contratamos a alguien que pensé que era muy talentoso para dirigir la compañía conmigo, los primeros años las cosas marcharon bien. Sin embargo, nuestras visiones del futuro empezaron a desviarse y finalmente tuvimos un tropiezo. Cuando ocurrió, la Junta del Directorio lo respaldó a él. De ese modo a los 30 años estaba afuera. Y muy publicitadamente fuera.
Había desaparecido aquello que había sido el centro de toda mi vida adulta, fue devastador. Por unos cuantos meses, realmente no supe qué hacer. Sentía que había decepcionado a la generación anterior de empresarios, que había dejado caer el testimonio cuando me lo estaban pasando. Me encontré con David Packard y Bob Noyce e intenté disculparme por haberlo echado a perder tan estrepitosamente. Fue un absoluto fracaso público e incluso pensaba en alejarme del valle.
No obstante, lentamente comencé a entender algo, yo todavía amaba lo que hacía.
El revés ocurrido con Apple no había cambiado eso ni un milímetro. Había sido rechazado, pero seguía enamorado. Y así decidí comenzar de nuevo. En ese entonces no lo entendí, pero sucedió que ser despedido de Apple fue lo mejor que podía haberme pasado. La pesadez de ser exitoso fue reemplazada por la liviandad de ser un principiante otra vez, menos seguro de todo. Me liberó para entrar en uno de las etapas más creativas de mi vida. Durante los siguientes cinco años, comencé una compañía llamada NeXT, otra compañía llamada Pixar, y me enamoré de una asombrosa mujer que se convirtió en mi esposa.
Pixar continuó y creó la primera película en el mundo animada por computadora, Toy Story, y ahora es el estudio de animación más exitoso a nivel mundial.
En un notable giro de los hechos, Apple compró NeXT, regresé a Apple y la tecnología que desarrollamos en NeXT constituye el corazón del actual renacimiento de Apple.
Además, con Laurene tenemos una maravillosa familia. Estoy muy seguro de que nada de esto habría sucedido si no me hubiesen despedido de Apple.
Fue una amarga medicina, pero creo que el paciente la necesitaba. En ocasiones la vida te golpea con un ladrillo en la cabeza.
No pierdan la fe. Estoy convencido que lo único que me permitió seguir fue que yo amaba lo que hacía. Tienen que encontrar eso que aman. Y eso es tan válido para su trabajo como para sus amores. Su trabajo va a llenar gran parte de sus vidas y la única manera de sentirse realmente satisfecho es hacer aquello que creen es un gran trabajo.Y la única forma de hacer un gran trabajo es amando lo que hacen. Si todavía no lo han encontrado, sigan buscando. No se detengan. Al igual que con los asuntos del corazón, sabrán usted sabrá cuando lo encuentre. Y al igual que cualquier relación importante, mejora con el paso de los años.
Así que siga buscando hasta que lo encuentre. No se detengan.


La tercera historia es sobre la muerte

Cuando tenía 17 años, leí una cita que decía algo parecido a "Si vives cada día como si fuera el último,
es muy probable que algún día hagas lo correcto".
A mí me impresionó y desde entonces, durante los últimos 33 años, me miro al espejo todas las mañanas y me pregunto: "Si hoy fuera en último día de mi vida, ¿querría hacer lo que estoy a punto de hacer hoy?" Y cada vez que la respuesta ha sido "No" por varios días seguidos, sé que necesito cambiar algo. Recordar que moriré pronto constituye la herramienta más importante que he encontrado para ayudarme a decidir las grandes elecciones de mi vida.
Porque casi todo -todas las expectativas externas, todo el orgullo, todo el temor a la vergüenza o al fracaso, todo eso desaparece a las puertas de la muerte, quedando solamente aquello que es realmente importante.
Recordar que van a morir es la mejor manera que conozco para evitar la trampa de pensar que tienen algo que perder. Ya están desnudos. No hay ninguna razón para no seguir a su corazón.
Casi un año atrás me diagnosticaron cáncer. Me hicieron un scanner a las 7:30 de la mañana y claramente mostraba un tumor en el páncreas. Yo ni sabía lo que era el páncreas. Los doctores me dijeron que era muy probable que fuera un tipo de cáncer incurable y que mis expectativas de vida no superarían los tres a seis meses.
Mi doctor me aconsejó irme a casa y arreglar mis asuntos, es el código médico para prepararte para la muerte. Significa intentar decirle a tus hijos todo lo que pensabas decirles en los próximos 10 años, decirlo en unos pocos meses. Significa asegurarte que todo esté finiquitado de modo que sea lo más sencillo posible para tu familia. Significa despedirte. Viví con ese diagnóstico todo el día.
Luego al atardecer me hicieron una biopsia en que introdujeron un endoscopio por mi garganta, a través del estómago y mis intestinos, pincharon con una aguja mi páncreas y extrajeron unas pocas células del tumor. Estaba sedado, pero mi esposa, que estaba allí, me contó que cuando examinaron las células en el microscopio, los doctores empezaron a llorar porque descubrieron que era una forma muy rara de cáncer pancreático, curable con cirugía. Me operaron y ahora estoy bien.
Fue lo más cercano que he estado a la muerte y espero que sea lo más cercano por unas cuantas décadas más. Al haber vivido esa experiencia, puedo contarla con un poco más de certeza que cuando la muerte era un útil pero puramente intelectual concepto: Nadie quiere morir. Incluso la gente que quiere ir al cielo, no quiere morir para llegar allá. La muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella.
Y es como debe ser porque la Muerte es muy probable que sea la mejor invención de la Vida. Es el agente de cambio de la Vida. Elimina lo viejo para dejar paso a lo nuevo. Ahora mismo, ustedes son lo nuevo, pero algún día, no muy lejano, gradualmente ustedes serán viejos y serán eliminados. Lamento ser tan trágico, pero es muy cierto. Su tiempo tiene límite, así que no lo pierdan viviendo la vida de otra persona.
No se dejen atrapar por dogmas, es decir, vivir con los resultados del pensamiento de otras personas.
No permitan que el ruido de las opiniones ajenas silencien su propia voz interior. Y más importante todavía,
tengan el valor de seguir su corazón e intuición, que de alguna manera ya saben lo que realmente quieren llegar a ser. Todo lo demás es secundario.
Cuando era joven, había una asombrosa publicación llamada The Whole Earth Catalog, que era una de las biblias de mi generación. Fue creada por un tipo llamado Steward Brand No muy lejos de aquí en Menlo Park, y la creó con un toque poético.
Fue a fines de los 60, antes de las computadoras personales y de la edición mediante microcomputadoras, por lo tanto, en su totalidad estaba editada usando máquinas de escribir, tijeras y cámaras polaroid.
Era un tipo de Google en formato de edición económica, 35 años antes de que apareciera Google: Era idealista y rebosante de hermosas herramientas y grandes conceptos.
Steward y su equipo publicaron varias ediciones del The Whole Earth Catalog, y luego cuando seguía su curso normal, publicaron la última edición. Fue a mediados de los 70 y yo tenía la edad de ustedes.
En la tapa trasera de la última edición, había una fotografía de una carretera en el campo temprano en la mañana, similar a una en que estarían haciendo dedo si fueran así de aventureros.
Debajo de la foto decía: "Manténganse hambrientos. Manténganse descabellados". Fue su mensaje de despedida al finalizar. Manténganse hambrientos. Manténte descabellado.
Siempre he deseado eso para mí. Y ahora, cuando se gradúan para empezar de nuevo, es lo que deseo para ustedes. Permanezcan hambrientos. Permanezcan descabellados.

Gracias a todos.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

Y cuando uno pensaba que no podía ser peor


O lo que es lo mismo, los tejanos siguen encabezando la lista de los más peligrosos en puestos de gobierno gringo.

En efecto. Una vez que el tal W abandonó la oficina Oval, pensábamos que no podría surgir otro candidato tejano tan malo y negativo como él, pero, la vida te da sorpresas, como dice la canción del panameño Blades, y ¡zas!, que se aparece el ricardito Perry y para colmo encabeza todas las listas de popularidad republicanas para ser el suspirante a esa oficina el próximo año.

Podríamos poner aquí una serie de datos sobre el suspirante supremacista blanco y republicano, pero no queremos causar daños irreversibles a los posibles lectores-seguidores del mismo con esa información.

Baste por ahora decir que el “come perros calientes extra grandes”, se opone al muro EE.UU.-México y prefiere que sean las botas del ejército con más implementos tecnológicos los que se dediquen a vigilar la frontera, pero como buen gringo, no permitir que eso afecte los negocios entre los dos países… así las cosas, bien podemos decir, que como todo republicano que se precie de serlo, este caballero la vida humana la tasa en valor económico negociable y lo demás, son “patrañas comunistas”.

¿Será que ganen otra vez? ¿Está el planeta tierra listo para otro caos como el dejado por el tal W? ¿Será que los gringos lo hagan una tercera vez? Eso de tener que esperar, a veces, desespera.

"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
 Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

No ser el único ni estar solo

O lo que es lo mismo, muchos mexicanos buscamos la solución, lástima que los que toman las decisiones sean los únicos que no hacen nada por cambiar.

Este es otro correo electrónico que me ha llegado y que copio intégro. Puede ser real o no... eso es harina de otro costal. Lo que es cierto es lo que expresa y a lo que me uno con singular alegría.
Está acreditado al huerfano del candidato asesinado en Tijuana hace 17 años, Luis Donaldo Colosio. Ahora Luis Donaldo Colosio Riojas, de tan sólo 25 años de edad, abogado y catedrático expresa su sentir por México... Espero que el escrito y el recuerdo, azote los sueños de los asesinos intelectuales y de facto, porque son esos los que no deberían de respirar libres jamás.

EL LLANTO DE UN MEXICANO



Por Luis Donaldo Colosio Riojas


Me preocupa. Me preocupa que veo a un país olvidado por sus líderes, quienes se concentran en sacar adelante sus carreras y a sus partidos antes que a su gente.


Me preocupa ver un abismo de desigualdad y diferencia, permeado todo por la infame indiferencia de quienes tienen la responsabilidad de honrar la confianza de su gente.

Me preocupa ver que en el Congreso imperan el caos y la desunión, que los ‘triunfos’ de mis diputados sean ver quién difama más al otro o quién silencia con más fuerza. Que exista un aura de trabajos inconclusos y que los pocos que se dedican al trabajo son sopesados por quienes se dedican al ultraje. Me preocupa ver más respeto en las tribunas de un clásico de futbol mexicano que en los escaños y curules legislativos.

Funcionarios públicos ausentes o sumisos (NISI) (Ni trabajan, pero SI cobran) y fuerzas policiales abandonadas o corrompidas es el maltrato que nos dejan nuestros gobernantes. Benditas aspiraciones de nuestros jóvenes con tanta materia prima corroída. No es sorpresa que ‘ni estudien, ni trabajen’ si el sistema educativo es cada vez menos adecuado y continúa decayendo gracias a quienes se supone deberían levantarlo. El empleo y las oportunidades son virtualmente inexistentes y nuestra economía es tratada con la lujuria de unos cuantos.

Me preocupa mi tierra, sangrando a borbollones, con sangre nacional y extranjera, de quienes depositaron su confianza en unos cuantos. Me preocupa que ‘esos cuantos’ tampoco sean eficaces porque ‘algunos muchos’ se empeñan en que fallen con tal de alzarse el cuello y alardear un ‘Se los dije’.


La desigualdad de ideas nunca ha sido crimen, pero el callarlas y asesinarlas es nuestro nuevo movimiento nacional.


Miles de millones de pesos, de nuestro dinero, de nuestros impuestos, se reparten a ‘unos cuantos’ para hacer bien ‘muchos nadas’, mientras tanto nuestros niños tienen hambre, tienen sed y tienen miedo. Miedo, no de una inseguridad que crece sin medida, sino de lo que seguramente terminarán siendo: seres olvidados y marginados por su patria y a quienes luego se les reclame de ‘holgazanes’. Se les castigará por ineficientes y por no saber aprovechar las infinitas oportunidades inexistentes que tuvieron. Nuestros niños, ¿pero qué demonios les hicimos?

Me preocupan todos y cada uno de los miembros de mi familia, más de 112 millones de ellos, que miran al futuro sin un rumbo certero, ese rumbo que nuestros predecesores se negaron rotundamente a asegurar y que ahora miran con desconcierto alegando que ‘no es su culpa’. Y la pelea continúa; y las divisiones incrementan; y las diferencias se exaltan; y nuestros niños, mientras tanto, sufren.


¿Pero qué te pasa, México? ¿En qué momento se volvió rutina suicidarte?

Me preocupa mi gente, que prefiere esconderse frente a una pantalla de televisión que detrás de un libro, o mejor aún, de un oficio. Me preocupa que la política de desarrollo colectivo nacional en estos momentos pareciera que se llama 'resignación', pareciera que se llama 'derrota'. (dificil pelear contra las diversas mafias que se apoderan de los puestos públicos para saquear el pais)

Me niego rotunda y enfáticamente a quedarme dormido, a darme por vencido. Así me tachen de por vida de demente o inadaptado. Qué ilusos somos todos al pensar que México necesita héroes, si lo único que le hace falta es la atención de sus ciudadanos, o mejor quizá, unos cuantos más de estos.


Este es el movimiento de la tercera insurrección mexicana, cuyo campo de batalla se libra en nuestros propios corazones, donde las únicas armas que encontremos y utilicemos deberán ser la paz, el trabajo y la Patria; suficientes muertes ha soportado lo sagrado de este suelo, y la tierra que se tiñe de rojo con la sangre de mi sangre es testigo de mi entrega. La batalla se gana en el corazón de nuestra gente, al denunciar nuestras propias faltas al país... y a nuestra estampa.


"Una sola piedra puede desmoronar un edificio.
 Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"

lunes, 3 de octubre de 2011

LA DIFERENCIA ENTRE MÈXICO E INGLATERRA

O en otras palabras, otro mexicano que se siente orgulloso de su país, pese a todo lo malo que hay en él.

Tal cual copio para sus mercedes este correo electrónico que me llegó recién y que en gran medida (pese al descubrimiento este fin de semana de dos cabezas sin cuerpo en la capital mexicana) la esperanza de que aún habemos mexicanos que nos setimos orgullosos de serlo.
LA DIFERENCIA ENTRE MÈXICO E INGLATERRA

Por Francisco García Pimentel Ruiz


Pasé un año en Inglaterra; un país de primer mundo. Fui allí a estudiar una Maestría, porque se reconoce como uno de los países con mejor calidad de vida, más profunda cultura, una increíble historia y gran nivel de estudio.
¿Saben lo que me encontré?
Me encontré un país increíblemente hermoso; pero, como todos, con políticos de derecha e izquierda corruptos e impopulares, con problemas de discriminación grave, con terrible depresión económica, con la mayor tasa de desempleo en décadas, con problemas de migración, con asesinatos y con robos. Un país con leyes absurdas, con famosos ridículos y vulgares, con periódicos de porquería. Un país que enfrenta actualmente una guerra que no se puede ganar contra enemigos que él mismo ayudó a crear. Un país con pobreza, con desigualdad, sumido en el individualismo y la relatividad.
Es decir, un país como todos, con muchos problemas, que en muchas cosas se parece a México.
Digo eso y la gente me pregunta a menudo: Entonces ¿cuál es la principal diferencia entre México e Inglaterra? Y yo les digo: primero, el concepto de patria. Segundo, el concepto de trabajo.
Me explico:
Primero, los ingleses son gente que está orgullosa de ser inglesa. No de dientes para afuera, ni sólo en el mundial, ni sólo en las celebraciones patrias. No sólo para echar balazos o mentar madres. Están profundamente orgullosos de su tierra y de su patria.
Ellos se sienten, por eso, obligados hacia su patria. Uno de ellos me lo dijo con claridad: para cada inglés, su casa es su castillo. Por ello, es verdad que son limpios, cuidadosos y ahorrativos. Porque ellos quieren aportar al país y no se sientan a esperar que el país les de todo.
Ellos saben que hay políticos buenos y malos, fresas y populacheros, de izquierda y de derecha. Con respecto a eso, votan y opinan. Pero ante todo, participan en sus comunidades a nivel local, promueven la cultura en sus colonias y no se sientan a esperar que todo venga desde arriba. Inglaterra es un país que, a nivel local, es dirigido y activado por los ciudadanos; no por la elite política ni por la familia real.
Creo que entienden el concepto de patria, de nación, de república. La patria, para ellos, es de todos. Y eso trae derechos pero, sobre todo, obligaciones. Pagan sus impuestos, ayudan en su colonia, participan en la política, no compran pirata, no dan ni piden mordida, hablan y discuten entre ellos y luego se toman una taza de té.
Jamás escuché a un inglés (y conocí muchos), hablar mal del gobierno o de su país en general frente a mí. Luego uno de ellos me explicó que ellos no suelen hablar mal de su país frente a extranjeros. Cuando alguien de otro país viene a Inglaterra, encuentra, por ello, un país mágico, desarrollado, limpio y alegre. Da la impresión, para el visitante, de que Inglaterra es un país de ensueño.
¿Saben eso qué provoca? Más turismo, más inversión y… más orgullo.
Segundo: los ingleses trabajan. Trabajan mucho. Valoran la importancia del trabajo, desde el punto de vista del trabajador y desde el punto de vista del empleador. Pagan buenos sueldos y trabajan jornadas completas. No están tratando de fregarse uno al otro y, ¿saben? Las empresas funcionan. La gente se siente segura en su empleo y el patrón se siente contento con sus empleados.
¿Saben eso qué provoca? Más desarrollo, más satisfacción y… más orgullo.
Luego volví a México. Un país, como todos, con políticos de derecha e izquierda corruptos e impopulares, con problemas de discriminación grave, con terrible depresión económica, con problemas de migración, con asesinatos y con robos. Un país con leyes absurdas, con famosos ridículos y vulgares, con periódicos de porquería. Un país que enfrenta actualmente una guerra contra enemigos que él mismo ayudó a crear. Un país con pobreza y con desigualdad.
O sea, un país como todos.
Sin embargo, llevo apenas un mes y ya estoy HARTO de que todos se estén quejando todo el tiempo y de que hablen siempre mal de mi país. Estoy harto de que la gente piense que este es un país subdesarrollado, se dedique a hacer huelgas imbéciles y hacer comentarios sobre lo mal que está todo, sobre lo inepto que es el gobernante en turno, sobre lo malos que son los programas de la tele.
Estoy harto de que el taxista, el guía de turismo y todos los que atienden a los visitantes, no hagan más que quejarse de lo mal que está la situación. ¿No saben que el turismo y la inversión extranjera son dos de las principales herramientas para el desarrollo del país? Me desespera que este país esté sumido en la intolerancia y en el pesimismo.
Por eso te vengo a decir lo siguiente:
México es uno de los países más espectaculares y bellos del mundo. Cualquier europeo daría la vida por tener unas playas tan increíbles, una riqueza tan infinita, una variedad tan rica. ¿Somos los únicos que no nos damos cuenta de nuestra propia riqueza cultural, histórica y, sobre todo, humana? El día de hoy, México cuenta con el mayor PIB de su historia, una de las menores tasas de desempleo desde hace décadas, una inflación que nuestros papás no podrían haber soñado, una inversión privada en constante crecimiento y una infraestructura que, créeme, no es mucho peor que la del primer mundo. En Inglaterra también hay baches y los camiones se retrasan a veces.
Si tú crees que México está peor que nunca, una de dos cosas: o has perdido la razón o has perdido la memoria. Pregúntales a tus papás. Pregúntales lo que valía su voto, lo que valían sus ahorros, lo que eran las carreteras. Pregúntales cuántos estudiaban la universidad o la prepa hace cuarenta años.
No soy idiota. Sé que tenemos problemas, muchos y graves. Pero tienes que saber que no somos ni los únicos ni, de lejos, los peores. Hoy México está mejor que nunca en muchos aspectos, y tiene que seguir creciendo.
Por eso, te pido sólo una cosa: piénsalo dos veces cuando hables mal de tu patria. Entre broma y broma, te la vas a acabar creyendo, y luego tus amigos, luego tus colegas, tu comunidad, tu país. Y luego el mundo.
Opina, grita, haz lo que quieras. Pero sobre todo, trabaja y siéntete orgulloso de vivir en un país en donde la gente se cuida, los peatones sonríen, la comida es deliciosa, la cultura es mestiza, las iglesias están llenas, las playas son cálidas, las montañas son majestuosas, las familias están unidas y el clima es fenomenal.
¡Ya quisieran poder decir eso los ingleses!

Ahí queda eso para meditar... y actuar.
"Una sola piedra puede desmoronar un edificio. Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645) Escritor español"